Desde el reinado de Isabel de Hungría, la planta del romero tiene fama de ser un producto rejuvenecedor. El romero es conocido desde la antigüedad en todos los sitios como producto y condimento curativo. Esta planta aromática actúa favorablemente sobre todo el sistema nervioso vaso motor e influye provechosamente en los nervios del corazón.
Es una planta de olor agradable que debería tener en la cocina un lugar privilegiado entre las especies, pues quien conozca su utilidad para la salud la sabrá utilizar y apreciar.
Si echamos el romero fresco en vino viejo, obtenemos un bueno tónico para el corazón, muy eficaz para la presión baja, también para todas las personas que estén pálidas y débiles además de ser muy conveniente para la gente mayor.
Después de una gripe, o alguno otro trastorno semejante, una pequeña copa de vino de romero ayuda a un rápido restablecimiento. Este bonito y modesto arbusto, con sus hojitas y sus flores, es un apreciado condimento y una medicina curativa.
A.Vogel. El Pequeño Doctor. Editorial ARS
Medica, S.A. - Barcelona, 1986.
Rubellus Petrinus